Iba
a empezar con el "cómo hacer para" pero pensé que encontraría mamitas
que no recibirían tan bien este post así que comenzaré con los ejemplos para
que me crean que sí es posible y que vean de dónde parto.
Me
puse a pensar en mis pequeños de las clases de estimulación temprana. Y en un
papi que vi una vez y que cuando (mea culpa no debí meterme) traté de decirle a
su pequeña de cuatro años (que no era alumna mía por eso mi culpa no debí
meterme donde nadie me llamó) que guarde un rompecabezas que yo la ayudaba a
guardar, me dijo como si fuese la cosa más lógica que "ah no, a ella no le
gusta jugar con rompecabezas y no guarda nada".
Yo
tengo la regla estricta de no meterme con hijos ajenos salvo que sean mis alumnitos
y/o salvo que me hayan pedido consejo las mamás. Pienso que no soy quién para
meterme en la educación que cada padre le quiera dar a sus hijos y como no
estoy con ellos 24/7 y no son mis alumnos, por lo tanto no es que parte de su
educación esté a mi cargo, es asunto de cada mamá o papá cómo manejen
diferentes situaciones con sus pequeños. Con la excepción cuando veo que
un pequeño está a punto de golpear a otro o de lanzarle algo (algo que le puede
dañar) o de hacerse daño sin darse cuenta, y no hay otro adulto cerca, ahí
trato de evitar el conflicto entre los pequeños porque, lo siento, no puedo con
mi genio. Y no me gusta decir "eso no se hace" o decir simplemente
"no", si no explicarle a la criatura lo más simplemente posible, por
qué es que eso no está bien.
Hay
mamis que cuando llegan a mis clases y les hablo de rutinas y de orden y de
límites se espantan un poquito y piensan que exijo mucho a una criatura menor
de 3 años. Se trata de hacerlo todo parte del aprendizaje con juegos y de una
manera que se haga hábito en ellos. Si una mamá dice que es mucho pedirle
a un niño de más de 2 años que guarde un juguete a pesar de que se le indica,
yo les enseño a cualquiera de mis alumnos de a partir de 14 meses. Cantando
canciones, con ayuda y mucha paciencia y mucha celebración cuando lo logran así
no sea del todo, señalando, acercándoles la caja donde pueden guardar el
juguete, llevándolos de la mano a guardar algo, poquito a poquito se van
acostumbrando y antes del mes ya saben que cuando se canta la canción y se
señala el juguete, el juguete se guarda y cuando lo guardan las primeras veces
se les aplaude mucho, cuando ya es un hábito se les felicita cada vez y se les
enseña a decir gracias (así sólo puedan decir "as").
Al
ser niños tan pequeños no pretendo hacer que limpien todo lo que desordenan
porque es imposible, pero sí que ayuden con algunos juguetes como jugando,
cantando, aplaudiendo, felicitando, convenciendo (porque al principio necesitan
el convencimiento de que mamá los lleve de la mano con el juguete para siquiera
ponerlo en su lugar y aún así es complicado). Es parte de formar el hábito y
acá les digo algunas ideas de cómo comenzar:
1. Atento, atento: Primero que nada debemos asegurarnos
de tener su atención, porque de nada sirve que intentemos enseñarles cómo
guardar las cosas si está mirando hacia otro lado o hacia otras cosas, no es
necesario que te mire a los ojos aunque es preferible en mi opinión, pero sí es
importante saber que te está prestando atención y te escucha.
2. Especifica: Señala al juguete en el suelo que
quieres que recoja y señala al lugar donde lo debe guardar, no sólo digas
"guárdalo", recuerda que estamos hablando con un niño enre 1 y 2
años, 2 años y medio, hay que mantener las cosas simples y claras. Ayuda
también que tú te acerques al juguete específico y lo señales, puede que tu
pequeño(a) no sepa el nombre del juguete o quizás no pueda seguir la indicación
si se la das desde el otro lado del cuarto. Anda hacia el juguete, señálalo,
luego camina hacia donde debe ir y señala en el lugar donde debe ponerse, si es
necesario, guíalo de la mano haz una caminata divertida, haz algún sonido que
le llame la atención, hazlo como un juego.
3. Un paso a la vez: Los niños pequeños sólo pueden seguir
indicaciones de un paso a la vez. En vez de decir "recoge el carrito y
guárdalo" haz una pequeña pausa entre tus indicaciones. Señalamos el
juguete y le decimos "recógelo" y luego una vez que el pequeño tiene
el juguete en la mano le señalamos el lugar donde va y le decimos "guárdalo"
o "a guardar". Si juntamos muchas indicaciones a la vez los pequeños
se confunden. Yo opto por indicarles "agarro juguete" y se los doy y
si están sentados les digo una vez que lo tienen "arriba, arriba"
para que se paren y luego "a guardar" mientras cantamos, señalando
dónde debe ir. Una vez que ya se han acostumbrado a esta rutina sólo es
necesario decir "a guardar" cantando una canción y ya por costumbre
empiezan a levantarse para poner en los lugares que ya conocen.
4. Halago: Cuando tu pequeño complete los pasos,
asegúrate de celebrarles lo que hicieron. Algo sencillo como
"¡¡bravo!!" y aplaudirles o "¡muy bien, guardaste!". Lo
importante es siempre darles un cumplido para que sepan que es algo bueno y les
guste hacerlo. Los motiva a continuar.
5. No esperes
perfección: Recuerda
que tu pequeño recién está comenzando, recuerda que es UN JUEGO lo que estamos
haciendo, y es para lentamente comenzar el proceso de limpieza. No esperes que
tu pequeño de un año pueda limpiar por más de unos pocos minutos (5 o menos) o
que vaya a limpiar todo el cuarto con sus juguetes regados él solito. Puede que
estén muy divertidos y quieran continuar limpiando contigo (ojo, CONTIGO no
solos) y eso está perfecto, sólo no lo fuerces y lo vuelvas una tarea, recordemos
que esto tiene que ser como parte del juego. Juego con el juguete, luego como
parte del juego lo devuelvo a su lugar. Si lo hacemos divertido y les mostramos
cómo se hace, los guiamos, no lo van a sentir como una obligación.
El
proceso de limpiar y ordenar les enseña muchísimo a nuestros niños. Aquí
algunas cositas.
1. Seguir indicaciones
simples: Enseñarles a
los pequeños a recoger sus juguetes es una excelente manera de practicar
indicaciones simples. Aprenden a escuchar, a prestar atención y a realizar algo
que se les está pidiendo. Es algo muy positivo para su desarrollo.
2. Construyendo
Expectativas: Al
enseñar a los pequeños a limpiar siendo tan chiquitos, estamos poniendo las
bases para expectativas futuras que podemos tener para ellos. Todo es
hábito, se empieza pequeño y se forma dicho hábito, de esta manera no tienes que
enseñarle a tu niño de 3, 4, 5 años recién a ordenar sus juguetes o limpiar las cosas que deja en el suelo porque ya saben cómo. Es
menos probable que quieran tratar de forzar esos límites sobre limpieza y orden porque
es parte de su rutina, algo que siempre han hecho. Es una expectativa y así es
como siempre ha sido.
3. Responsabilidad: Enseñando a los pequeños a
ordenar/limpiar tempranamente, les estás enseñando a responsabilizarse por sus
cosas. Cuidamos las cosas tratándolas bien (sin lanzar los juguetes con fuerza)
y guardándolas en su sitio para que no se rompan y se malogren.
Este
es un concepto que se va a tener que reforzar de muchas formas a través de los
años pero recoger sus juguetes y sus cosas (ayudando) les enseña responsabilidad
aún cuando el concepto no sea algo que comprendan todavía.
4. Habilidades para
organizar: Limpiar y
tener ciertos lugares para las cosas ayudan a los niños a aprender cómo
mantenerse organizados mientras crecen. Les estamos enseñando que todo
tiene un lugar. En las clases yo siempre les digo a las mamitas que es una
rutina, no es simplemente dejarlos que vayan por donde quieran y hagan lo que
fuere. Todo es mediante el juego, todo es tratando de hacerlo divertido para
ellos y sin obligarlos a algo que realmente se oponen a hacer si no buscando la
forma de que colaboren, pero son rutinas y conforme las van aprendiendo ellos
mismos las siguen sin ningún tipo de problema. Saben que después de X canción
viene Y actividad, ellos solitos anticipan y como es parte del juego, se
divierten con ello y están siguiendo un orden en las cosas.
Nuevamente
este es un concepto que se va a tener que reforzar a través de los años de
muchas maneras ("hay un momento y lugar para cada cosa") pero esta es
una herramienta que puede reforzarlo.
Mientras van creciendo…
Veo
a mis alumnitos y conforme van avanzando y creciendo su habilidad para limpiar
también crece. Al año y medio, cerca de los 2 años siempre necesitan guía y
ayuda para recoger las cosas, pero no hay que estarles diciendo con cada cosa
"recoge" y "guarda", sólo es necesario señalar algo y decir
"a guardar", cantar la canción y solitos empiezan y pueden continuar
con algunas cosas sin mayor ayuda, a veces con algunos recordatorios por ratos
pero pueden guardar algunas cositas sin mayores indicaciones.
Veo a mis sobrinos a sus 5 años y ellos siempre han tenido el hábito de guardar sus juguetes, y lo hacen solos, por supuesto a veces tienen sus días y sus ratos de mal humor, en que no quieren guardar una cosa u otra y se molestan y hacen sus berrinches, pero ya no es que hay que tener una pelea con ellos por cada cosita porque es algo que saben que se espera de ellos desde temprana edad y es parte de su rutina diaria. Y no por sacar mi orgullo de tía pero he acompañado a su mamá a llevarlos a jugar a más de un sitio de juegos y mis sobrinos son los únicos niños que vi en la hora o dos horas que pasamos en estos lugares, que recogían cada cosa luego de terminar de jugar con ella y la ponían en donde la encontraron mientras que todos los demás, niños incluso mayores, si los papás no recogían, las cosas se quedaban ahí tiradas. Cuando algo es un hábito y algo que viene desde temprana edad, una expectativa, ya es algo para ellos parte de su rutina y algo que hacen sin pensarlo demasiado, simplemente "es lo que se hace".